29 sept 2016

Un Té Más. Pt. 3

-Carta y Canción-

Al tomar la flor sentí que mi cuerpo se dejaba invadir con su perfume, aunque era artificial no dejaba nada librado al azar. La textura era tan refinada que cualquiera que no conociese la flor real supondría que tal perfección era imposible de ser un producto de la naturaleza. Mi corazón empezaba a acelerarse y me despido nuevamente del portero.

Camino al trabajo mi cabeza no podía dejar de pensar en esto que me estaba ocurriendo y vincularlo con el último sueño, eran coincidencias que asombrarían hasta a un mago. Al llegar, note que la recepcionista no guardó el sentimiento y expresó con su mirada casi un descontento palpable en el aire al verme apurado sin esbozar saludo alguno, parecía que quería decirme algo pero no presté atención. La subida de los siete pisos se superó nuevamente y fue mas lenta. Mi primera actividad del día era llamar al correo y fue tan instantáneo que mientras lo pensaba ya lo estaba haciendo. Mi decepción no se hacia esperar mientras escuchaba como me decían que el paquete había llegado por un servicio de mensajería internacional privado que resguardaba la información del remitente. Me tildo por un instante en "internacional", mientras me comenta que la única forma de saberlo es accediendo a enviar una solicitud al remitente, que puede ser aceptada o no, para evitar que esa información se brinde a cualquier persona, puesto que se trataba de un servicio premium que aseguraba el mejor trato del envío, mayor velocidad y seguridad en la manipulación de la información que no estuviese en el paquete. Siento por un instante que estoy perdiendo el tiempo y solo recibo una publicidad. En resumen, debía esperar entre 48 y 72 horas para tener una respuesta. Mientras brindo la información requerida para la solicitud veo ingresar al piso a la recepcionista dirigiéndose hacia mi con un sobre en la mano. Al cortar, recibo la recriminación de mi actitud temprana comentándome que más temprano había llegado una carta para mi y que por mi reacción hice que ella tenga que subir. Con el humor un poco derrumbado pido perdón y pregunto quien envió la carta. Mi asombro fue tal que parecía que el tiempo se detenía. Una chica, con aspecto de mi edad, preguntó si trabajaba acá y, casi usando como cómplice a la recepción, dejo la carta sin mencionar su nombre. Completamente extasiado decidí no abrirla hasta la noche, ya tenia muchos sentimientos dentro.

Ya con la luna vigilando mis movimientos, calmo, con un té verde al alcance de mis labios, abro la carta. Escrita a mano, con una letra exquisita femenina, comienza detallando paisajes, montañas con nieves eternas y cielos celestes, arboles plantados perfectamente para que sus ramas mas altas se abracen entre sí con el viento, edificios altos iluminados en la noche y campanas de templos cercanos. Parecía un poema. Cerca del final la letra comenzaba a temblar como me siento yo en este momento, como mis manos tiemblan al sostener la carta. El poema se transforma en una canción de amor sin música con cada oración.
"Si ya llegó, espero que hayas disfrutado el té. Quiero verte. Esta noche esperaré otro >Te quiero< ." finaliza la carta con un pequeño dibujo de una flor de jazmín.
Desde que se fue a vivir a Japón, hace cuatro años, se que es su flor favorita. Cuatro años pasaron de haber guardado un sentimiento. Cuatro años de sentir a mi corazón extrañar un amor que no pudo ser gritado.

....Proximo : Continua en  http://fechin07.blogspot.com.ar/2016/11/un-te-mas-pt-4.html ....

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